mi balance anual emocional

  Alguna vez pensé que las máquinas de escribir  me gustan porque lo que ellas escriben no se puede borrar, no se puede corregir. Está impreso acá desde el momento en que lo pensé y a la eternidad, a la gloriosa eternidad.
  Soñé que me enamoraba, es la segunda vez esta semana. El otro día soñé que me enamoraba del hijo del mecánico que no tiene hijos. Y hoy soñé que me enamoraba, pero de un chico que tenía un perrito en un tren. Nos reíamos un montón.
  Pero bueno: ayer hice un móvil de estrellitas de colores, y me sobraron un montón y las puse todas en un frasquito que en la tapa dice "demasiado tarde". ¿ya será demasiado tarde? no, ni ahí!
  Bienvenida a casa, mi pequeña! Ojalá bienvenir fuera un verbo, así podríamos conjugarlo juntas.

  Si te tengo que contar algo, te digo que acá está todo bien. De lo único de lo que no estoy orgullosa, es de mi adicción a la nicotina. Después todo bien, en general.. todo bien

Comentarios

  1. Me alegro del reencuentro con tu pequeña, concluyendo al fin la saudade que sentirías por tan preciado objeto.

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