a mi no me gusta citar

y por fin nos encontramos hoy acá, diciendo ese montón de cosas intrascendentes. será que si el ser humano fuera siempre trascendente la vida sería un poco aburrida, o demasiado formal, o quizá no hablaríamos muy seguido entre nosotros.

quiero que llueva, que llueva hasta que no recordemos el sol. por haber sido tan ingratos con él. quiero ver el cielo y que me recuerde lo triste que es la lluvia sin un techo. quiero entristecer, porque es parte de los días también. quiero que todos caminen un ratito.. una, dos, tres, cuatro, mil cuadras. y nunca serán suficientes. nunca serán suficientes. qué fácil es hablar, qué fácil es decir que cada uno se merece lo que tiene. quién soy yo para decirte que el mundo está mal? si todavía yo no encuentro nadie que tenga ganas de escuchar..